-TIERRA DE CAMPOS- PARAISO DE LENTEJAS

-TIERRA DE CAMPOS- PARAISO DE LENTEJAS

El paraíso alude al jardín del Edén, admite distintos significados, aunque parece ser que el original hace referencia aún jardín extenso, bien arreglado, bello, donde el orden y la armonía existen entre árboles, flores y animales.

Coincidirán conmigo, que conservar y mantener vivo el territorio que circunscribe a lo que conocemos como “Tierra de Campos” es una responsabilidad que está en el compromiso de cada uno.

Lentejas de Tierra de Campos.

Al cultivo de legumbres en general y de la lenteja en particular se le atribuye toda clase de virtudes; muy saludables desde el punto de vista nutricional, insustituibles  en la dieta mediterránea, de un sabor singular, alimento que forma parte de la cultura popular, sostenible como ningún otro cultivo, engramado en la gastronomía tradicional, alimento local de interés general y a la vez económico.

De esta forma es una evidencia que mantener las tradiciones no es ser un antiguo, es reconocer la singularidad e identidad de un lugar.

En las últimas décadas ha disminuido la ingesta de hidratos de carbono procedentes de las legumbres, las razones son distintas pero lo importante es la reflexión que debemos hacer en analizar donde nos hemos equivocado para no volver a repetir el mismo error. Fomentar la cultura en torno a las legumbres tradicionales españolas es el mejor activo para poder disfrutar en el plato de la máxima calidad.

Flor de lentejas.

La educación es el cimiento que permite mantener nuestro cuerpo en las mejores condiciones y a la vez sabe cuidar de todo lo que le rodea. Comprar lentejas de  “Tierra de Campos” es ser parte activa de la conservación de un hábitat único, permite vertebrar el territorio rural donde se da y favorece el relevo generacional.

Comprar en consciencia es un acto político y social de primer orden, que cada día debemos tenerlo presente en este mundo globalizado, donde los gestos locales son la riqueza y garantía de la diversidad como muestra de la grandeza de la naturaleza.

Vainas de lentejas.

La lenteja de “Tierra de Campos” se vende envasada para poder controlar y garantizar la trazabilidad. El color del grano es marrón o pardo y el calibre es pequeño. El sabor y el aporte nutricional las convierten en un alimento a tener muy en cuenta para una buena alimentación.

CREMOSO DE LENTEJAS Y CHORIZO

Ingredientes

  • Harina de lentejas “IGP Tierra de Campos”, 250 gr.
  • Chorizo Cular Ibérico Extra de Bellota de Guijuelo, 200 gr.
  • Cebolla variedad “Roja” de Laredo, 1 unid.
  • Agua, 6 -7 dl.
  • Aceite virgen extra variedad “Verdeña, Negral y Alquezrana” de Bierge, 3 dl.
  • Pasta Brik, 10 -12 obleas.
  • Patata variedad “Agria” de Valderredible, 2-3 unid.
  • Sal de Naval.

Elaboración

  1. Poner las lentejas en la termomix y triturar hasta convertir en harina.
  2. Cortar el chorizo ibérico en brunoise y reservar.
  3. Pelar y lavar la cebolla, cortar en brunoise y rehogar en 1 dl de aceite. Añadir la harina de lentejas e integrar bien en el sofrito.
  4. Incorporar el chorizo a la mezcla anterior, rehogar todo junto y verter el agua poco a poco e ir cociendo la masa. Podemos terminar la cocción en el cazo sin dejar de mover o poner en el termomix y emulsionar la masa hasta su total cocción, 8 – 10 minutos.
  5. Una vez la masa está hecha, poner a punto de sal y escudillar en un bol.
  6. Una vez fría hacer los paquetes con media oblea de pasta brik y una cucharada de la masa. Reservar hasta tener todos los cremosos realizados.
  7. Lavar, pelar y cortar las patatas. Volver a lavar las patatas y cocer partiendo de agua fría. Una vez cocidas, escurrir y colocar en un vaso de turmix con un buen chorro de aceite y sal. Triturar y reservar.
  8. Freír los cremosos de lentejas y chorizo.
  9. Emplatar, poner una raya de puré en el plato y colocar de forma armoniosa 3 ó 4 cremosos de lentejas y chorizo.
  10. ¡¡Buen provecho¡¡

Comentario

La gastronomía popular, fruto de la convivencia e instinto de relación entre el ser humano y el territorio nunca deben despreciarse. La cocina identitaria es la mejor carta de presentación de cualquier rincón de la tierra.

Las singularidades que ofrece son como piezas de un puzle que permiten observar la complementariedad y riqueza de la naturaleza al servicio del colectivo humano.

Afortunados de vivir en el país de la piel de toro extendida, comiendo lentejas de  “Tierra de Campos” permitimos nutrir esta tierra y a la vez nutrir nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra alma.

 

                     Cambiando el hábito de comer, cambiamos el mundo.

 

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