25 Nov “EL ARTE DE LA COCINA ARAGONESA” -CASA DE ARAGÓN EN CANTABRIA-
El pasado 25 de octubre fui invitado por la presidenta de del Centro Aragonés de Cantabria, María Antonia García Solar a presentar el libro “El arte de la cocina aragonesa” con motivo de las jornadas culturales como celebración de las Fiestas de La Virgen del Pilar.
El acto tuvo lugar en el Centro Gallego de Santander, donde su presidente José Antonio Otero Hermida ejerció de anfitrión poniendo el local a disposición de los socios de la Casa de Aragón en Cantabria.
Emotiva tarde de encuentro con muchos aragoneses que viven en Cantabria de distintas partes de Aragón. Un ambiente de lujo, donde la nobleza aragonesa, la amistad y la fraternidad se respiraba con emoción y satisfacción.
Un verdadero placer compartir con el público el trabajo que hizo Darío Vidal medio siglo atrás y aclarar y poner las cosas en su sitio. Agradezco a la vida el poder seguir transmitiendo la obra de Darío Vidal, un aragonés leído, culto y a mi juicio el auténtico valedor de la cocina tradicional aragonesa.
La publicación del libro “El arte de la cocina aragonesa” pone luz donde algunos querían que siguiera habiendo oscuridad y deja claro a los lectores quien fue el verdadero autor de tan emblemático trabajo que se atribuían otros.
Aquí la carta que Darío Vidal escribió a Ismael Ferrer para testimoniar la verdad sobre un recetario usurpado y replicado hasta en cuatro ocasiones en distintos libros editados en torno a la cocina aragonesa en los años 1985, 2000, 2001 y 2004.
Alcañiz, otoño de 2015.
Sirva este escrito y exposición para dejar claro donde algunos han querido cambiar la historia de un libro que lleva por título COCINA ARAGONESA. Los textos los firma Antonio Beltrán y el recetario se lo atribuye José Manuel Porquet. Mi única y humilde pretensión es manifestar y dar fe de que el recetario me fue usurpado y el formato como está redactado es otro al original.
Me explico;
En los años 1970 trabajaba en Barcelona de periodista, siempre me ha cautivado el mundo del comer y profundizar y saber cómo se hacen las recetas y cuáles eran sus entresijos. Tenía en mi poder un proyecto de libro de cocina Alcañizada en el que había trabajado una temporada. Un día cenando con el Pintor Enrique Trullen Gracia empezó a tomar fuerza por qué no elaborar un recetario sobre el Bajo Aragón.
Un buen día me vino a ver al programa Nacional de información e investigación en Barcelona, Javier Arbués. Al parecer se había enterado de que estaba en mi pensamiento hacer un libro sobre la cocina Aragonesa. El señor Arbués había creado con sus tíos la editorial Oroel. Javier le dijo a Darío, entre nosotros podemos sacar un libro bueno de Cocina Aragonesa.
Así que dediqué varios años todos los fines de semana a viajar por todo Aragón y recabar información de recetas tradicionales Aragonesas. Estuve recopilando recetas los años 1973, 1974 y 1975.
Javier Arbués, natural de Ayerbe, le decía a Darío, tú me vas entregando recetas y te voy liquidando. Javier le espetaba el que paga descansa y eso hacía. Darío nunca firmó ningún recibí. Y así iba pasando Darío entregaba recetas y Javier le iba pagando.
Javier Arbués tenía otro plan, o quizás las amistades teniendo lo esencial le hicieron cambiar de parecer y un buen día le dijo a Darío, Se acabó el presupuesto ya no se realizará el libro.
A todo esto, Javier siempre le preguntaba a Darío, porque las recetas no llevan cantidades. Darío le respondía, la gente nunca dice las cantidades. Darío le argumentaba; Cuando preguntas a los cocineros y guisanderas sobre las cantidades, así contestan. Un poco más de media hora. Darío le confesó a Javier si queremos hacer un libro serio hay que poner las recetas tal como las dicen las mujeres.
Por otro lado, Jaime Buesa Ara, fotógrafo de la Vanguardia le preguntaba a Darío sobre aquel libro de Cocina Aragonesa, ¿Qué pasa con él? Darío le explicó, se ha terminado el dinero y se ha quedado todo parado.
Con el tiempo, un amigo de Darío le comenta, me he enterado por Jaime Buesa que está haciendo fotos para un libro de cocina de Aragón.
El resultado ya se imaginan ustedes, una copia de mis recetas a las que han añadido cantidades que no las había en el formato original y de las que yo tengo la certeza pues así consta en mi toma de datos de cada receta, el lugar y la persona que me confesó su elaboración.
De hecho, hay dos Recetas en el libro que son curiosas en cuanto a la publicación. La primera es el Bacalao de Don Miguel, es una receta inventada por mi suegro (aquí puedo explicar cómo se gestó). Y la otra es la receta del Rancho Putas, que a pesar de que el profesor Antonio Beltrán escribió por lo curioso del nombre nunca pudo saber de dónde venía o recogí esa receta.
Todos los facsímiles de las recetas originales los lego a mi amigo Ismael Ferrer, para que haga lo que considere y si los saca a la luz pública deje claro y cada cosa en su sitio, la procedencia de las recetas y el responsable de la toma de datos de las mismas.
Atentamente
Fdo: Darío Vidal Llisterri.
Gran interés y sorpresa al descubrir los presentes la historia oculta de 400 elaboraciones, donde se cita a los informantes y la población donde se recogió la receta.
Material culinario de gran valor patrimonial, refleja con rotundidad una época y un tiempo de la historia aragonesa con exactitud, cierto es, que no hay mejor termómetro para analizar y conocer una sociedad que saber que comía y cuáles eran los ingredientes habituales en la cocina.
Hoy el paladar y el gusto están de enhorabuena, la conciencia y el buen hacer colectivo se complementan y hacen que todas estas recetas para gloria de todos los amantes y estudiosos de la cocina tradicional aragonesa queden recogidas para satisfacción de la sociedad aragonesa.
Si hay un libro que recoge como ningún otro lo ha hecho la cocina tradicional aragonesa, no cabe duda de que tenemos que hablar de este encomiable trabajo. Con seguridad estamos ante el recetario más importante del siglo XX en Aragón y una referencia dentro de la cocina tradicional española.
¡¡Buen provecho¡¡
Cambiando el hábito de comer, cambiamos el mundo.
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